En su intervención durante el diálogo interactivo con el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias (GTDFI) en el marco de la 48ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, Lemaadla El Khoury, hija de una de las víctimas de desaparición forzada en los campamentos de Tinduf, en el sur de Argelia, denunció la impunidad de la que gozan los torturadores y los autores de graves violaciones de los derechos humanos y de actos de secuestro en los campamentos separatistas del polisario.
Asimismo, la activista saharaui indicó que su asociación registró e identificó hasta ahora 134 casos de personas desaparecidas entre los cientos de saharauis que fueron secuestrados y torturados hasta la muerte por los dirigentes del polisario en connivencia con los servicios de inteligencia argelinos en centros de detención secretos, especialmente en las prisiones de Erraachid y de Dhaybiya, cerca de los campamentos de Tinduf.
Con esta ocasión, la ONG invitó al Grupo de Trabajo de la ONU a "prestar la debida atención a la cuestión de la desaparición de nuestros seres queridos en los campos de Tinduf", y a presionar al gobierno argelino para que "revele el destino de los desaparecidos, y recupere los restos o los restos humanos de los fallecidos entre ellos, para ofrecerles una sepultura digna".