Esta charla fue animada por el ministro de Habices y Asuntos Islámicos, Ahmed Toufiq, sobre el tema "Los frutos de la fe en la vida humana", inspirándose en el versículo coránico: " Al creyente, varón o hembra, que obre bien, le haremos, ciertamente, que viva una vida buena y le retribuiremos, sí, con arreglo a sus mejores obras" (Surah Annahl).
Toufiq subrayó al principio de su intervención que la buena vida prometida por el Creador en el Corán está sujeta a dos condiciones principales, a saber, la fe y las buenas acciones, señalando que la fe sustenta la buena vida y permite al hombre realizar buenas acciones.
Según él, muchos exégetas han dado distintas interpretaciones del versículo citado, entre ellos Tabari, que asocia la buena vida a la felicidad y la satisfacción, Taalibi, que la vincula a la dulzura de la sumisión, y Baghaoui, que la refiere a la fortuna lícita, mientras que Ibn Achour ha señalado que tanto las mujeres como los hombres tienen derecho a la promesa de la buena vida.
Más allá de sus diferencias, estas interpretaciones coinciden en la centralidad de la dimensión psicológica en términos de sensación y recepción, siendo el hombre en ambos casos llamado a dar gracias al Señor, señaló Toufiq.
Para él, las cuatro misiones del Profeta consisten en transmitir la revelación, cambiar la situación de los creyentes empezando por una educación espiritual llamada "Tazkiya (purificación)", enseñar las obligaciones y el rechazo de las prohibiciones, y aprender la sabiduría, las virtudes prácticas y el conocimiento espiritual que contiene el Libro Sagrado.
El conferenciante agregó que existen muchas publicaciones que critican el orden mundial actual y los estilos de vida de moda, tanto en su sentido liberal como en su crítica filosófica del pensamiento modernista que los sustenta. En este sentido citó una serie de obras de Pitrim Sorokin, fundador de la sociología estadounidense en la Universidad de Harvard y teórico del amor altruista y desinteresado.
Sobre las posibilidades de llevar una buena vida en el contexto actual, señaló que a los musulmanes les va bastante bien gracias a su aparente fe, observando, sin embargo, que muchos de ellos ya no aspiran a una buena vida que combine satisfacción y dignidad, sino que parecen rendirse a las engañosas apariencias de esta vida, al bienestar que no tiene más norma que la búsqueda del placer.
Para Toufiq, el papel del Estado consiste en crear las condiciones de una buena vida mediante programas de desarrollo, mientras que la misión de los ulemas y predicadores es ante todo recordar a la gente, a través de los medios de comunicación tradicionales y nuevos, las familias, las mezquitas y las escuelas, la centralidad de la Unicidad de Alá, que da libertad a los creyentes y los protege de la tentación.
El orador subrayó que los predicadores deben asumir su papel en la defensa de los preceptos coránicos, que es también el propósito de la creación por Su Majestad el Rey, Amir Al Muminin, del Consejo Superior de Ulemas presidido por el Soberano.
Toufiq concluyó que, gracias a la fe, la Ummah está dotada de una enorme energía que hay que explorar y liberar sus profundos manantiales para un desarrollo global al servicio del hombre, su punto de partida y su fin último.
Al término de esta charla, SM el Rey fue saludado por el Gran Muftí de Egipto, Shawki Allam, Sheikh Mohamed Mansour Sy, representante del Jalifa General de la Tariqa Tiyania en Senegal, Sheikh Moustapha Sonta, Jalifa General de los Tiyaníes, presidente de la Sección de la Fundación Mohammed VI de Ulemas Africanos en Costa de Marfil, Sheikh Moustapha Diatra, consejero del Jalifa General de la Tariqa Muridiya en Senegal, y Sheikh Abdarrahmane Kanta, representante del portavoz oficial de la Tariqa Qadiriya en Nyassia, Senegal.
También saludaron al Soberano Hassan El Menai, profesor de la Universidad Zitouna y miembro del Consejo Islámico Superior de Túnez, Mahmoud Abdou Zouber, presidente de la Sección de la Fundación Mohammed VI de los Ulemas Africanos en Malí, Lang Delaney Vincent Zayd, presidente de la Sección de la Fundación Mohammed VI de los Ulemas Africanos en Sudáfrica y Abdelkader Cheikh Ibrahim, presidente de la Sección de la Fundación Mohammed VI de los Ulemas Africanos en Somalia.