Los debates se centraron en el seguimiento del suministro regular de cereales y harina y la comercialización de la producción nacional de cereales en buenas condiciones, dijo el ministerio en un comunicado recibido por la MAP hoy lunes.
Todas las federaciones del sector expresaron su firme compromiso a, por una parte, asegurar la recogida de la producción nacional de cereales de los agricultores en buenas condiciones y, por otra, garantizar permanentemente las existencias de cereales en el nivel actual, lo que permitiría cubrir por lo menos un período de 4,5 meses de necesidades de consumo nacional.
Además, el Gobierno establecerá un plan de comercialización de incentivos para fomentar la recolección de la producción nacional a precios remuneradores en beneficio de los productores de trigo blando para la campaña agrícola 2019-2020.
También cabe destacar la renovación del sistema de licitación para el suministro de trigo blando a los molinos harineros industriales para la fabricación de harinas subvencionadas. Las primeras licitaciones del año se reservarán exclusivamente para la cosecha nacional.
Igualmente, la suspensión de los aranceles se prorrogará a más allá del 15 de junio de 2020 a fin de mantener el precio de costo de las importaciones a un nivel accesible y permitir que los importadores aprovechen las oportunidades del mercado mundial y garanticen la renovación permanente de las existencias para satisfacer por lo menos 4,5 meses de necesidades de consumo, a sabiendas de que las previsiones de la producción mundial de cereales para el ejercicio económico 2020-2021 parecen muy prometedoras, prosigue la misma fuente.