"El compromiso de Marruecos es una importante contribución a las medidas tomadas por las Naciones Unidas para una reanudación del diálogo político inter-libio", indicó la portavoz del Ministerio francés de Asuntos Exteriores.
"Francia de felicita de la continuación de los esfuerzos del Reino de Marruecos para relanzar el proceso político en Libia a través de los esfuerzos destinados a facilitar el diálogo entre la Cámara de Representantes y el Alto Consejo de Estado, en Buznika", subrayó la portavoz, citada en un comunicado.
Las iniciativas en favor de debates políticos inclusivos en Libia, particularmente los de los países de la región, son esenciales para permitir una salida de la crisis, agregó.
Para Francia, "no existe una solución militar al conflicto libio: la solución será política y pasará por un compromiso de los países vecinos de Libia", subrayó la misma fuente, señalando que "estos países son los primeros concernidos por los riesgos que plantea la crisis libia para la seguridad y la estabilidad regionales".
"Su papel ante los actores libios es por lo tanto indispensable y puede desempeñar un papel estabilizador, a diferencia de las injerencias de las potencias exteriores", concluyó la portavoz del Quai d'Orsay.
Una segunda ronda de diálogo inter-libio se celebró del 2 al 6 de octubre en Buznika.
En la declaración final que culminó esta reunión celebrada bajo los auspicios de la ONU, las delegaciones del Alto Consejo de Estado y de la Cámara de Representantes de Libia anunciaron acuerdos globales sobre los criterios y los mecanismos para ocupar los puestos de soberanía, previstos en el artículo 15 del Acuerdo Político Libio de Sjirat.