"Los recientes acontecimientos en El Guerguerat, en la zona tapón fronteriza con Mauritania, que sirve de importante enlace de tránsito comercial y civil hacia y desde otras partes de África, constituyen un nuevo elemento particularmente peligroso", afirmó Jensen en una declaración a la MAP.
El polisario, que bloqueaba deliberadamente el cruce hasta que Marruecos interviniera para restablecer la movilidad civil y comercial, anunció la movilización de sus milicias "en una escalada y una evolución alarmante en la que el potencial de un conflicto armado sería un desastre para toda la región", advirtió el ex jefe de la MINURSO.
Según Jensen, la frustración del polisario y su incapacidad para hacer avanzar sus ambiciones, acentuadas por la desastrosa situación a todos los niveles en los campamentos de Tinduf, podrían hacer estallar la situación.
El mismo recordó que el secretario general de las Naciones Unidas, quien expresó su profunda preocupación, y el Consejo de Seguridad llamaron a la moderación y al respeto de las disposiciones del alto el fuego y a reducir las tensiones.
Para Jensen, la diplomacia debe desempeñar más que nunca su papel para evitar lo peor. La alternativa a la acción militar sigue siendo una solución negociada, añadió, destacando que el plan de autonomía propuesto por Marruecos en 2007 y que el polisario estaba dispuesto a negociar en 1996, es considerado por el Consejo de Seguridad y la Comunidad Internacional como creíble y serio.
"La iniciativa de Marruecos ofrece una alternativa honorable a la guerra y una mejor perspectiva para una paz justa y duradera", concluyó.