Interviniendo con motivo del consejo de administración de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (NARSA), el ministro destacó la importancia del proyecto de la educación vial en las orientaciones futuras en materia de seguridad vial, insistiendo en la necesidad de movilizar a todos los sectores concernidos para concretar los objetivos previstos.
Las orientaciones estratégicas en términos de seguridad vial, explicó Amara, consisten en invertir en las tecnologías modernas, acompañar a los profesionales, dar más importancia a la investigación científica o mejorar la seguridad vial, prestando especial atención a las zonas de acumulación de los accidentes en los ejes viarios considerados potencialmente peligrosos, así como a los puntos/secciones de "acumulación de accidentes" a través del Programa Especial de Seguridad Vial (PSAS).
Por otra parte, el ministro llamó a la organización de formaciones continuas para los monitores de autoescuelas y la continuación del proceso de desmaterialización de los procedimientos, la integración de las nuevas tecnologías así como la modernización del sector de las autoescuelas invitando al mismo tiempo al desarrollo del sistema informático correspondiente.
En cuanto a las orientaciones futuras, Amara subrayó la importancia de movilizar recursos, fomentar la innovación, la inversión y la creatividad en el ámbito de la seguridad vial, señalando que se trata de analizar las principales causas de los accidentes de tráfico.
Por otra parte, el responsable destacó la mejora significativa de los indicadores de la seguridad vial, en particular en el año 2020, que se caracterizó por una disminución del 17,06 % del número total de accidentes de tráfico y de 16,98 % de los accidentes mortales.
Asimismo, el número de fallecimientos ha disminuido un -18,03%, el de heridos graves un -22,31%, mientras que los heridos ligeros han bajado un 19,20%, prosiguió el ministro, precisando que el período de confinamiento ha afectado mucho a estos indicadores.