En esta declaración, Budapest reiteró su apoyo al plan de autonomía, presentado al Secretario General de la ONU el 11 de abril de 2007, y a los esfuerzos de desarrollo emprendidos por Marruecos en las provincias del sur.
Asimismo, Hungría saludó los serios y creíbles esfuerzos de Marruecos, como polo regional de estabilidad y socio privilegiado para el desarrollo en África.
En este texto, Hungría confirmó la importancia de la asociación estratégica que liga Budapest y Rabat.
A este respecto, Hungría se congratuló del rumbo marcado por SM el Rey Mohammed VI en una dinámica de apertura, progreso y modernidad y se felicitó de su Nuevo Modelo de Desarrollo y de la promoción de la regionalización avanzada.
Las dos partes subrayaron la importancia de izar el nivel de su cooperación económica y comercial al nivel de las excelentes relaciones políticas bilaterales.
Hungría saludó el papel "decisivo y ejemplar" de Marruecos en la lucha contra la inmigración irregular y el terrorismo, reafirmando que el Reino es un "socio estratégico de la Unión Europea".