En este mensaje, el Soberano expresa a Steinmeier, en su nombre y en el del pueblo marroquí, sus calurosas felicitaciones y sus mejores deseos de salud y felicidad, así como de más progreso y prosperidad para el pueblo alemán.
Su Majestad el Rey se felicita, en esta ocasión, de las relaciones de sólida amistad y estima mutua entre los dos países, que constituyen la piedra angular de la cooperación bilateral en diversos ámbitos.
El Soberano también se congratula del fuerte impulso que caracteriza invariablemente los vínculos entre los dos países, reiterando su firme determinación a seguir trabajando para fortalecer todavía más esta fructífera cooperación al servicio de ambos pueblos.