Los manifestantes corearon eslóganes para denunciar el clima de terror e intimidación y las campañas de acoso y persecución contra los activistas del Hirak, y exigieron la liberación inmediata e incondicional de todos los detenidos o encarcelados arbitrariamente.
Con esta ocasión, denunciaban las numerosas y graves violaciones del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos en Argelia, retomando los eslóganes del Hirak, pidiendo la caída de la oligarquía político-militar en el poder.
Asimismo, llamaron al ACNUDH a intervenir para obligar al régimen argelino a poner fin a las torturas y violaciones en las cárceles y estructuras de seguridad del país, y a las detenciones arbitrarias contra los activistas del Hirak.
El pasado mes de marzo, la ACNUDH denunció "el deterioro de la situación de los derechos humanos en Argelia" y "la continua y creciente represión contra los miembros del movimiento prodemocrático Hirak", subrayando que las disposiciones del Código Penal argelino, vagamente redactadas, se utilizan para restringir la libertad de expresión y perseguir a quienes expresan opiniones disidentes.