"Marruecos, cuyo Soberano SM el Rey Mohammed VI, que Dios le asista, preside el Comité Al Quds, considera estas violaciones como un acto inadmisible y susceptible de atizar las tensiones", afirmó el ministerio en un comunicado.
El Reino "considera que las medidas unilaterales no son la solución, y llama a favorecer el diálogo y el respeto de los derechos", agrega la misma fuente.
El ministerio subrayó que Marruecos afirma la necesidad de preservar el estatus especial de la ciudad de Al Quds y de proteger el carácter islámico de la ciudad santa y la sacralidad de la mezquita Al Aqsa.